En los años en que comencé en colombofilia no se podía ir a soltar a desde la costa de África y las sueltas de fondo y gran fondo se hacían desde altamar.
En aquel tiempo, al igual que se hizo posteriormente con las primeras sueltas desde Casablanca, se ponía en duda la distancia desde la que soltaban las palomas y hubieron muchas sueltas en las que, la rumorología apuntaba que se hacían poco más arriba de la isla de Lanzarote.
Y así, sin fundamento en uno u otro sentido, se fueron cuestionando las sueltas desde alta mar y se ha creado en torno a ellas, una leyenda que pervive aún hoy día, en la que se ha transmitido y admitido entre muchos colombófilos un desprecio a estas sueltas.
Así se afirma que las palomas en estas sueltas son "papelitos al viento", que las palomas llegan por mera casualidad, que no tienen capacidad para orientarse debidamente, que es la suerte la que juega el papel más importante y otras muchas afirmaciones que conducen a generar dudas sin que, realmente, haya datos que pudieran dar crédito a estas afirmaciones.
Hoy en día no cabe duda sobre la distancia recorrida por las palomas en cuanto desde un responsable del barco, se garantiza el punto exacto, en cuanto a la longitud y la latitud, desde el que se realiza la suelta.
Y, en general, las recepciones de estas sueltas desde altamar, no son ni mejores ni peores que las que se llevan a cabo desde la costa de África y, como éstas, dependen mucho de las condiciones meteorológicas, especialmente de la dirección e intensidad del viento, así como del recorrido que haga el barco en cuanto la suelta se lleve a cabo desde un punto más próximo o más alejado de la costa africana.
En otras partes del mundo, en las que se hacen sueltas desde altamar, gozan de mucho prestigio, algo que tal vez hemos de ir sentando en la mente del colombófilo canario que, sin darse cuenta de ello, se desprestigia asimismo.
En la próxima campaña del 2021 no podremos soltar desde Marruecos como consecuencia de las medidas que se pudieran adoptar por causas de la pandemia por el COVID-19, por lo que debemos PLANIFICAR ADECUADAMENTE los planes de vuelo y estas sueltas, sin caer, como cada año, en los mismos errores con sueltas dobles desde el mismo punto, un solo soltador y otros extremos que hemos de corregir. Y, a ser posible, hacer sueltas entre los 500 y 600 kilómetros ya que son puntos en los que la distancia recorrida y la recepción de palomas, guardan cierto equilibrio.
juan reboso.